La casa se empieza por los cimientos y en cuestiones de marketing es imprescindible empezar por elegir bien las acciones según la empresa, el sector, el público objetivo y su competencia entre otros. Esto lo conseguimos a través de una estrategia digital para orientar al cliente sobre porqué tomamos las decisiones con respecto a las acciones propuestas de marketing.
Debemos tener en cuenta los objetivos marcados para los diferentes canales digitales ya que no todas las acciones son válidas para los diferentes clientes, porque sus propios clientes no son los mismos.
La clave del éxito del marketing es conocer profundamente la empresa, su competencia y saber identificar los clientes potenciales de esa propia empresa. Esto se consigue a través de la estrategia digital.
Cuando estos aspectos están cubiertos, el éxito prácticamente está asegurado porque somos capaces de saber qué es lo que necesitan los clientes y ofrecerlo.
El primer paso es una reunión con el cliente, para que nos cuente su trayectoria, sus experiencias, acciones de marketing que haya tenido y sus resultados, sus sensaciones, etc, y luego el equipo de marketing empieza a desarrollar la estrategia digital.
Cuando finalizamos la estrategia, el cliente previamente ya conoce la fecha de entrega que dependerá del tipo de negocio, volvemos a reunirnos para exponer esta estrategia.